A la hora de presentarlos la mejor opción es acompañarlos con nata montada y unas virutas de chocolate o frutos secos picados por encima.
Las cantidades que hemos presentado en esta receta servirá para preparar ocho flanes de tamaño estándar, deberemos cocinarlos en dos veces ya que la capacidad de la bandeja es de cuatro flanes.
Montamos el accesorio batidor en nuestro robot Küken.
Incorporamos 350 ml de leche, 250 g de queso mascarpone, 140 g de azúcar y cuatro huevos, recomendamos cascarlos en un bol aparte antes de añadirlos, así nos aseguramos que no hay restos de cáscara.
Batimos 25 segundos a velocidad 5.
En los recipientes que hayamos elegido para hacer el flan ponemos caramelo líquido en el fondo, los llenamos con la mezcla y los tapamos con film transparente o papel de aluminio uno a uno.
Lavamos el vaso del robot, lo volvemos a colocar y añadimos 1 litro de agua.
Montamos la bandeja de vapor honda encima del vaso.
Colocamos los recipientes que nos entren y cubrimos con papel de cocina para que absorba el exceso de agua que se desprende al cocinar al vapor. Colocamos la tapa.
Cocinamos 45 minutos a 120ºC.
Comprobamos que nuestros flanes están listos, para ello los pinchamos con un palillo y nos aseguramos que sale limpio. Si todavía no están cuajados avanzamos al paso siguiente y lo repetiremos las veces necesarias.
Cocinamos 5 minutos a 120ºC.
Dejamos atemperar los flanes y los metemos en la nevera para que se enfríen antes de comerlos.
8 raciones