En esta receta hemos utilizado tomates secos en aceite de oliva. Si usamos tomates secos deshidratados deberemos hidratarlos en agua templada 30 minutos antes de preparar la receta.
Para conservar el paté lo mejor es hacerlo en un tarro de cristal dentro de la nevera, y además
aconsejamos cubrir con una cucharada de aceite de oliva antes de poner la tapa y cerrarlo.
Montamos el accesorio cuchilla en nuestro robot Küken.
Añadimos 70 g de tomates secos en aceite de oliva, 160 g de almendras tostadas y peladas, 60 g de queso parmesano y 40 g de queso curado, ambos en trozos medianos, un diente de ajo pelado, y pimentón y pimienta al gusto.
Trituramos 30 segundos a velocidad 10.
Retiramos la tapa y con ayuda de la espátula empujamos hacia el fondo los restos que hayan podido quedar en la pared del vaso.
Trituramos 30 segundos a velocidad 10.
Probamos y rectificamos de sal, pimentón o pimienta, si es necesario.
Trituramos 30 segundos a velocidad 10.
4 raciones