Lo ideal para preparar esta receta es usar bacalao fresco, pero también podemos utilizar bacalao congelado y previamente descongelado.
Otra opción es comprar bacalao seco salado y desalarlo en casa, eso sí, es importante que esté bien desalado cuando preparemos la receta, si elegimos esta última opción no hará falta salar el bacalao antes de cocinarlo (paso 11), ya que podría quedar excesivamente salado, siempre estamos a tiempo de rectificar de sal al final de la receta.
Montamos el accesorio cuchilla en nuestro robot Küken.
Añadimos 150g de cebolla pelada y cortada en trozos grandes, 100g de puerro sin la primera capa y cortado en láminas, 100g de pimiento rojo troceado, y los dos dientes de ajo pelados.
Picamos 6 segundos a velocidad 6.
Retiramos la tapa y con ayuda de la espátula empujamos hacia el fondo los restos que hayan podido quedar en la pared del vaso.
Picamos 6 segundos a velocidad 6.
Sustituimos el accesorio cuchilla por el accesorio removedor.
Incorporamos 60ml de aceite de oliva.
Cocinamos 15 minutos a 120ºC y velocidad 1.
Añadimos 800g de tomate triturado, una cucharadita de sal, dos cucharaditas de azúcar, una cucharadita de pimentón dulce, 60ml de vino blanco y pimienta molida al gusto.
Montamos la bandeja de vapor honda y echamos un poco de aceite de oliva, podemos usar papel de cocina para repartir el aceite por toda la superficie. Colocamos los trozos de bacalao, con la parte de la piel hacia arriba, y los salamos ligeramente.
Cocinamos 40 minutos a 120ºC y velocidad 1.
Retiramos el bacalao y lo presentamos en una bandeja, vertemos por encima la salsa del interior del vaso y listo para servir.
4 raciones