Recuerda siempre probar la salsa antes de servirla, y dejarla a tu gusto, tanto en sabor como en textura. Además puedes preparar una gran cantidad y reservarla en la nevera durante 2-3 días para utilizarla en otros platos.
Montamos el accesorio removedor en nuestro robot de cocina Küken.
Incorporamos 50 ml de aceite de oliva.
Calentamos el aceite 2 minutos a 120ºC y velocidad 1.
Añadimos los solomillos cortados en trozos de unos 4 o 5 centímetros. Salpimentamos al gusto.
Cocinamos 10 minutos a 120ºC y velocidad 1.
Retiramos la carne y la reservamos en un bol.
Incorporamos en el vaso del robot 100 g de queso Roquefort, ligeramente troceado, 200 g de nata líquida, y salpimentamos al gusto.
Cocinamos 8 minutos a 120ºC y velocidad 1.
Añadimos la carne de solomillo que teníamos reservada.
Cocinamos 2 minutos a 120ºC y velocidad 1.
4 raciones