Esta receita é muito fácil de preparar e o resultado é requintado, contrastando a suculência do interior com o exterior estaladiço.
Lavamos y troceamos la pechuga de pollo en trozos pequeños.
Montamos o acessório lâmina no robot Küken.
Añadimos 2 dientes de ajo pelados y una ramita de perejil, lavada y bien seca.
Cortamos 10 segundos na velocidade 6.
Com a ajuda da espátula empurramos para o fundo os restos que ficaram na parede do copo.
Incorporamos la pechuga de pollo troceada.
Picamos durante 20 segundos à velocidade 6.
Añadimos 50g de pan de molde sin corteza, 100g de queso fresco, 100g de queso parmesano rallado, 100ml de leche y salpimentamos al gusto.
Misturar durante 20 segundos à velocidade 6.
Pasamos toda la mezcla a un bol, lo cubrimos con papel film y lo metemos en la nevera de 2 a 3 horas.
Una vez ha reposado la masa hacemos bolas con ayuda de las manos, las pasamos por huevo y pan rallado, y las freímos en aceite bien caliente.
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